Sistema térmico SATE
Beneficios del SATE
En la actualidad, este sistema se emplea mucho tanto en obras nuevas como en rehabilitación de edificios, ya que permite protegerlos y mejorar su envolvente térmica, y así aislarlos tanto del frío y como del calor
Contribución al mantenimiento de la fachada
El sistema SATE mantiene la envolvente del edificio y su estructura en condiciones termohigrométricas estables. Esto ayuda a mantener los materiales de construcción en buen estado al impedir su degradación por oscilaciones de temperatura (fisuras, grietas, mohos…).
Mínimas molestias a los usuarios durante su instalación
La instalación de un SATE requiere menos tiempo que otras intervenciones en fachada. Además, las molestias generadas a los habitantes del edificio debido a polvo, eliminación de escombros, ruidos… son mínimas en comparación con otro tipo de obras.
Reducción del riesgo de condensaciones, mohos y hongos
El SATE, por definición, está situado en la capa más externa de la fachada. Esto provoca que todo el cerramiento esté caliente, de esta manera, se reducen al máximo las condensaciones en el interior de los elementos constructivos.
Se mantiene la superficie útil de la vivienda
Esta es una de las grandes ventajas en las rehabilitaciones energéticas: no se reduce el espacio habitable en el interior de la vivienda.